miércoles, 22 de julio de 2009

El efecto "Stravaganzza"


El efecto Stravaganzza es lo que sucede a muchos hombres y mujeres cuando, al cumplir cierta edad, necesitan hacer algo diferente para llamar la atención de los demás. Frente a los comportamientos femeninos, más homogéneos a lo largo del tiempo, intentando conservarse atractivas, bellas, con buen tipo, los hombres sorprenden al recurrir a estratagemas más variadas con el parecido objetivo de sentirse más jóvenes y atractivos. Compran un coche deportivo, un yate, se lanzan de cabeza al gimnasio, se someten a operaciones de cirugía estética o se visten y actúan como jóvenes veinteañeros. Algunos cambian de pareja y se lían con mujeres mucho más jóvenes. El coche deportivo o el yate pasan a ser lo que vulgarmente se denomina "el tercer testículo", que puede volverles más interesantes y atractivos a los ojos de las chicas.

Los psicólogos podríamos asociarlo a sus mayores niveles de testosterona, o simplemente a ganas de impresionar o de ligar una vez que se han perdido otros atractivos, también a la falta de más méritos y a que se dispone de cierto nivel económico que puede permitir expansiones de este tenor. Consigue así el extravagante maduro competir con otros hombres más jóvenes y aumentar su cotización cara a las mujeres objetivo. En ausencia de fama, poder o influencia social, el mejor "tercer testículo" es una cartera repleta de dinero dispuesto a ser gastado con prodigalidad. Stravaganzzas más intelectuales, como convertirse en egiptólogo o aprender arameo tienen poco recorrido.

Hay algo de rapiña en estas actitudes, en las que quien destacó en algún terreno quiere obtener o mantener su capacidad o predominio en otro, a través de comportamientos estrambóticos, socialmente no mal vistos, pero de alcance limitado. También se puede interpretar como exceso de confianza o autosuficiencia que se refleja en pensamientos del tipo "por qué si soy tan bueno en otras cosas no lo voy a ser en esto", "si soy tan bueno en lo mío es que me merezco otras cosas" o "como soy bueno en otras cosas me puedo permitir esto y me lo tenéis que perdonar".

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